¿Y si en lugar de blog me mudo a Facebook?

lunes, diciembre 21, 2009

Y para los que no le atinaron...

...cumplí 5 años. Mi perfil dice otra cosa porque si no, no me dejaban poner mi blog (¿de dónde sacan eso de que alguien de 5 años no puede escribir un blog? Bueno, pero hay tanta gente falta de visión, que en fin.

Bueno, el caso es que ahora ya lo saben todos: cumplí CINCO.

Ahora sí se murió

No, no hablo de mi dragón ni de mis ganas de pizza. Hablo de la revista Nick de Estados Unidos. La de diciembre fue la última.
Sé que ya habíamos hablado del tema, pero pues es el mes y había que recordarlo. Dos minutos de silencio por la mejor revista del mundo: Nick México, y uno por la siguiente mejor: Nick Estados Unidos.

Voy a meter la nariz a donde seguro no me incumbe

Ok. Ya vi qué están haciendo los dragones luego de observarlos varios días: Hay un orificio muy pero largo y angosto en una de las montañas. Parece como que ni una jirafa pasaría por allí, pero los dragones se forman y, como las ratas que, por grandes que sean, caben por hoyos muy pequeños, se van metiendo poco a poco. Seguramente tienen huesos muy ligeros (¿huecos, tal vez?) y flexibles, porque de otra manera no podrían entrar por allí a menos que pasen de ser seres en tres dimensiones a bidimensionales, cosa que no he visto.
El caso es que por eso he visto a tantos dragones: cada uno tarda tanto en entrar que los demás no pueden hacer otra cosa sino planear y dar giros o vueltas.
Mi idea, claro, es subir a esa rendija y meterme a ver qué pasa allí adentro y, sobre todo, averiguar si mi dragón se encuentra en ese lugar. Algo en mis entrañas me dice dos cosas: 1) Tengo muchas ganas de una pizza de pepperoni y una dona glaseada. 2) Allí voy a encontrar a mi dragón.
Y mis entrañas son muy confiables (más para el punto número 1, pero esa es otra cosa).

miércoles, diciembre 09, 2009

Resulta que son sanitos

Creo que estoy en el árbol perfecto porque además de que todavía tiene varias hojas, y ya es invierno, me ha permitido ver claramente dónde se están metiendo todos los dragones que he visto volar.

Primero déjame contarte que ya los vi robarse una vaca que, aparentemente, muere instantáneamente con su mordedura, por lo que se me hace que tienen algún tipo de veneno muy potente. Y que bueno que la vaca se muere prácticamente sin darse cuenta, porque luego con su fuego la chamuscan y se reparten la carne. No parecen muy glotones y no atacan a vacas del mismo rebaño, como si fueran respetuosos (uy, sí, cómo no). Pero bueno, yo nomás te lo cuento como lo veo. La vaca les alcanza a unos seis dragones, y la combinan con ensalada, es decir, hojas de los árboles. ¿Quién iba a pensar que comerían tan sano? Por eso deben gustarles las verdolagas. Quizá deba pensar en cambiarle la dieta a mi dragón cuando lo encuentre, ¿no crees?

lunes, diciembre 07, 2009

¿Ya les dije...

...que puse los links a los blogs de algunos de los que entran con mayor frecuencia a mi blogcito? Por si no les han echado el ojo, aquí va la lista, pero antes tengo que decir que ya estoy harto de estar en el árbol viendo llegar dragones de todos tipos. ¿Pues qué no eran bichos raros?
Bueno, ahí van algunos blogs:

El de Ethan:

http://dragonchiva.blogspot.com

El del anticool de Dark Cosmo (así se puso él solito):

http://elanticooldedarkcosmo.blogspot.com/

El de Fede y Laita tienes pelis que ellas hacen:

http://fedeylaita.blogspot.com

Darkrai Uchiha dijo que quizá el dragón deba vivir su propia vida y yo deba regresarme a México, ¡pero mi dragón es un cachorrito! ¿Cómo voy a dejarlo solo en un lugar que ni conoce? Pero se ve que es muy bueno investigando, así que quizá me ayude a encontrarlo (y los demás también, ¿en? Porque yo ya quiero regresarme y darme un buen baño en el jacuzzi de la oficina de cristal):

http://elnuevoblogdetodo.blogspot.com (este empieza con la foto de un dragón parecido a uno que ya vi).

http://mitologiaconuchiha.blogspot.com/

Nicker #1 extraña a los Nickers. Yo extraño a Los Nick.

http://thenickers.blogspot.com/

El de Alamaster:

http://alamgomca.blogspot.com

irkenmagicafantasma ¡dibuja de pelos! No sé por qué dice que es frustrada si con ese talento ya debería estar mostrando su trabajo en revistas como… ay, no, Nick ya no existe. Pero en otras, aunque no haya otra tan cool.

http://lascaricaturasdechistina.blogspot.com

ITT hacía mucho que no aparecía en mi blog:

http://elblogdeitt.blogspot.com

El de joshua-san ya cumplió un año:

http://hablandodecom.blogspot.com

Y el de Carlos tiene chistes:

http://laorejadecarlosyjudith2.blogspot.com/


sábado, noviembre 28, 2009

¡Hoy es mi cumpleaños!

Hoy es mi cumple y estoy solo en un árbol.
No pizzas.
No donas.
No pastel.
No golosinas.
No regalos.
No fiesta.
No nada.
Y pensar que el año pasado me la pasé tan bien en mi cumple y armé tal relajo que luego Los Nick pasaron horas limpiando. ¡Qué divertido!
Y ahora...
Aquí, solito, buscando a mi dragón.

Pero, ¿sabes qué, blogcito mío? Cuando lo encuentre, y créeme, lo voy a encontrar, vamos a organizar el reven más recontramegacool del planeta. Y vamos a celebrar muchas cosas, entre ellas, mi cumple. Ya verás. Si no, dejo de llamarme Gussi Green.

viernes, noviembre 20, 2009

¡Casi me agarran!

Me escondí requetebien y el dragón ese por más que buscó y trajo a otros, no dio conmigo. Eso sí, lo único que yo pensaba era, ¿y si echan una bocanada de fuego? No sólo van a quemar las hojas secas, sino también mi lindo traserito. Pero no, nomás revolotearon por aquí y por allá y al final encontraron una piedra verde muy brillante (aquí entre nos creo que era un vidrio de botella que estaba desafilado por encontrarse en la orilla de un lago). Por lo visto, al final eso les encantó y hasta se pelearon para ver quién se lo quedaba.

Por mi parte, mientras no me agarren a mí, que agarren lo que quieran.

Lo que sí es que como pisaron la orilla del lago, pude ver bien sus huellas, y confirmo mi teoría de que no todos son iguales. Dos de ellos tenían patas con tres dedos, y cada “uñita” es más larga que yo. Digamos que si me hubiera caído en una huella, habría tenido serias dificultades para salir además de que fácilmente podrían haberme descubierto. El tercer dragón, sin embargo, dejó claramente marcadas cuatro dedos y garras que nomás marcaron un hoyo, así que supongo que son muy curvas y terminan en punta como aguja. En ningún caso quisiera verme entre las de nadie, así que más vale que me ande con cuidado.

Lo que más miedo me da es que un dragón se haga invisible y, estando así, él me vea pero no yo a él (obvio), por lo que podría capturarme fácilmente, ¿no crees? ¡Ojalá yo también pudiera hacerme invisible! Aunque, ya que estamos en esto de los deseos, ojalá estuviera en México con mi dragoncito comiendo donas y pizzas.

 

jueves, noviembre 19, 2009

¿Qué opinan?

Quiero saber qué opinan de todo lo que ha pasado últimamente, lo que les conté el día 17. Los dragones y eso. Lo de la cueva. Porque sigo subiendo la mentada montaña pero para mí es como subir al Everest! Y mientras, claro, los dragones nomás vuelan tantito y ya. 
Y de verdad: tienen una vista y oído impresionantes. Ya van varias veces que podría jurar que casi me ven y me agarran. Es como si supieran que deben estar a la defensiva. Grrrr.

miércoles, noviembre 18, 2009

Hoy le puse varias cosas nuevas a mi blog

Digo, en algo tengo que entretenerme en lo que me da sueño, ¿no? Así que hay un juego, links, blogs, playlist y a ver qué más me encuentro.
Además, escribí un montón sobre lo último que ha pasado. O que me ha pasado. O que nos ha pasado, porque no sé qué le esté pasando a mi dragón. 

Este dibujo lo mandó Dani




¿Te acuerdas que tengo un correo? Mándame dibujos, fotos, videos, o tus preguntas para "Querido Gussi Green". Ya sabes: los leo cuando quiero y solo si quiero, y los contesto igual: a veces. Pero de pronto sí me echo un clavado, como ahora, que vi este dibujo de Dani:








Me vio un dragón

Ok. Entremos al tema:

El caso es que no todos los dragones son iguales. Algunos son rojos y tienen alas negras. Otros son color turquesa con alas verdes o amarillas. Hay unos negros-negros-negros que tienen cara de pocos amigos. Hay otros verdes con ojos rojos. Unos tienen las alas más largas, otros tienen unas garras que podrían arrancar un árbol y los colores de sus miradas son diferentes: ojos amarillos (los negros los tienen así), verdes, rojos, morados, azules, naranjas. Algunos tienen cuernos o crestas, y los dos más espectaculares son uno casi transparente, como si fuera de cristal, y otro que es azul con verde y tiene plumas coloridas alrededor del cuello, en las puntas de las alas y en la cola, además de como una especie de cresta. Pero hasta ahorita, no he visto a ninguno igual a mi dragón.

Ah, y todos son más grandes, claro, porque recordarás que mi dragón es un cachorro (tamaño elefante adulto, pero cachorro al fin y al cabo).

Lo que comienzo a sospechar es que estos dragones no son todos del mismo lugar. Como ya te conté, blogcito mío, hay cosas que leo y entiendo (más o menos) y otras que están en alguna otra lengua dragón, supongo, porque los caracteres son diferentes y no entiendo ni pío. Además, ¡vaya que les encanta escribir en acertijos! Caramba, ¿no sería más fácil decir las cosas tal y como son? A ver, ¿qué se supone que haga con el mensaje que descifré anoche? Entiendo las palabras, pero nada más.

¡Uyuyuy! Ya me vio uno de los azules. Es que además tienen una vista que parece que traen telescopios en los ojos. Así que, me desconecto y compermisito.

martes, noviembre 17, 2009

Lo voy a buscar

Por supuesto que no me regresé a México. ¡Jamás dejaría solo a mi dragón! Y eso que la tentación del cajón de las golosinas me llama y me llama, pero un amigo es un amigo y yo no quiero regresar dejándolo a su suerte.

 

Pues busqué y el dragón no estaba. En ningún lado. Seguí caminando y llamándolo por todos lados y nada. También traté de olfatearlo, pensando que quizá sí se había hecho invisible, pero no olí feo por ningún lugar.

La zona donde estamos es muy boscosa y hay unas lomas que no parecen la gran cosa (bueno, no lo parecen para alguien de tamaño dragón. A mí me recuerdan los Himalayas o, de perdida, el Popocatépetl).

Estuve acampando allí porque la recepción de mi iPod era buena y buscaba una ruta que me pareciera la más obvia para ir… ¿a dónde? Ya estamos en la república Checa y se supone que en algún lugar de aquí es donde está desaparecida, también, la mamá del dragón.

El caso es que una noche comencé a ver mensajes en el cielo. Aunque ya conozco casi todas las letras, algunos estaban como en clave y no pude descifrarlos, pero lo que sí leí fue: “El origen del problema para incautos no era. Pero para el veneno de amatista la labor está lograda. En el agua me ves pero allí no estaré. De hielo parezco pero delicado no soy. Sigue las pistas y llega porque con esto, juntos por fin, la reina tendrá la pieza que falta en su corona. Ahora ya sabes qué hacer”.

No sé por qué, pero no entiendo nada del mensaje. Y no sé por qué, pero empiezo a pensar que quizá el dichoso heredero del que tanto hablan sí sea mi dragón, porque si no, ¿para que nos pegan tantas corretizas?

Estamos en otoño, los árboles pierden sus hojas y hace un frío del Yeti (ya sabes, del Hombre de las nieves —y no hablo de helados— uy, ya se me antojó uno doble de chocolate con oreo y hot fudge. Mejor me callo). Lo malo de las hojas secas es que hacen ruido cuando camino. Lo bueno de mi tamaño es que, ¿qué dragón va a verme fácilmente? (y eso que soy tan guapo), y lo otro bueno es que son calientitas para dormir, sobre todo si encuentro algún hueco seco Y DESOCUPADO en algún árbol (parece que todos los animales del bosque ya se los agandallaron y no queda casi ninguno disponible).

Pero volviendo al asunto de los letreros en el cielo, cuando leí eso de que había que llevarlo con ella pensé que quizá encontrándola a ella, quien quiera que fuera, daría con mi dragón, y en eso que empiezo a ver a varios dragones volando. 

miércoles, noviembre 04, 2009

No se hizo invisible

He estado buscando al dragón. Lo llamo y lo llamo... y nada. No se hizo invisible (si lo fuera, ya lo habría olido —qué mal se oye y se ve esa palabra—).
Ayer, traje pizzas y no vino.
Ahora la pregunta es: ¿me pongo a buscarlo o me regreso a México?

(Yo ya sé la respuesta, pero quiero saber qué opinas tú).

miércoles, octubre 28, 2009

¡No encuentro al dragón!

Ya lo busqué por todos lados y no está. Nomás me dormí un ratito y no sé qué pasó. ¡Me siento perdido! ¿Y si le pasa algo?

viernes, octubre 23, 2009

hasta hoy

Estamos ya en la República Checa. La travesía no fue fácil porque a cada rato nos topábamos con dragones que querían terminar con nosotros, pero lo de las verdolagas ha sido un éxito. Mi dragón no logra hacerse invisible pero lo oloroso de sus gases tumba hasta al dragón más agresivo.
Por cierto, el más agresivo fue uno que nos echaba tremendas llamaradas, pero lo que no se esperaba (y francamente, tampoco nosotros) fue que una llamarada mezclada con un buen pedo resulta en una explosión de magnitud espectacular. ¡Hubieras visto la cara que puso el malvado! Salió volando en sentido contrario.

Bueno, pero la cosa se pone un poco peor. Parece ser que la mamá del dragón ha estado prisionera desde hace mucho tiempo y nadie parece saber dónde la tienen... Ni quién. El porqué es un misterio mayor. Lo que sí sabemos es que no podemos confiar en nadie y tenemos que movernos con cautela. En cualquier segundo podríamos caer en las garras de uno de los malos, quienes, por cierto, lo que buscan es dejar de ser invisibles en el mundo humano para apoderarse de éste. ¿Será?

En fin.

Ah, y tengo en mi iPod algunos mensajes más que hemos visto en el cielo, al rato los subo.

lunes, octubre 12, 2009

Ideas claras

Ya tengo una idea más clara de en qué estamos metidos. Resulta que hay una lucha entre dos grupos de dragones. Los megahiperrequetecontrasupermalos quieren hacerse del poder para lanzar un ataque contra la humanidad y volver a reinar en el mundo. Los otros opinan que es mejor que cada quien viva en su mundo en paz sin meterse unos con otros.

Y para variar, hay una leyenda que dice que un príncipe será quien logre el objetivo, lo que no sabemos es: ¿el objetivo de qué bando? Y también ignoramos quién es el tal príncipe.

Pero ahora sí nos estamos moviendo hacia el este. Mi dragón sigue sin lograr hacerse invisible, pero gracias a que las acelgas le provocan los peores gases, hemos dejado fuera de combate a tres o cuatro dragones con mala pinta.

Por cierto, ese es otro problema: ¿Cómo saber cuáles dragones son buena onda y cuáles no? Por lo visto, sólo nos hemos topado con los mala leche.

En fin, te mantendré al tanto. Pasaremos por unas montañas por las que parece que no hay buena recepción wireless, pero donde encuentre, escribo.

Deséanos suerte, blogcito mío.

jueves, octubre 01, 2009

27

Y 27 kilos de acelgas después, mi dragón sigue allí.

miércoles, septiembre 30, 2009

De acelgas y kychos

Hemos estado metidos en una cueva tratando de dominar el asunto de la invisibilidad. Bueno, la del dragón, no la mía. Creo que sería más fácil conseguir la capa de Harry Potter que lograr que mi bicho consiga hacerlo.

Peeeero... hoy conocimos a una cosa extrañísima que resulta ser un kycho. Si no sabes qué es eso, blogcito mío, no te preocupes que ahora mismo te lo describo: imagínate un 8, ponle cuatro patas abajo y como veinte picos punk arriba. Así es un kycho. Ah, y tiene unos bracitos medio ridículos. Pero eso sí, corre como demonio (pero no es uno). El caso es que nos dijo que para volverse invisible, los dragones tienen que comer una hierba que se llama acelga y que sabe a rayos. Y mira que a mí me gustan los vegetales. Pero la acelga, no. Y al dragón, tampoco. Y resulta que debería ingerir como dos kilos de acelga más todo lo demás que ya te conté, y además concentrarse cañón para volverse invisible. Así que seguimos tratando.

Pero lo peor no es que aún no logre hacerse invisible, sino que la maldita acelga le provoca unos gases de pavor al dragón. Y tú ya sabes lo que es eso.

jueves, septiembre 24, 2009

Ya tengo y no todos pueden

Ok. Ya tengo más letras de la Lengua Dragón. Y ya descubrimos que no todos los dragones pueden hacerse invisible. Ahora el chiste es saber si el mío sí puede y entrenarlo para que lo haga. Así sería mucho más fácil escapar de los enemigos y conseguir pizzas y donas —pero pagaríamos por ellas, ¿eh?— (no vayan a creer que somos unos ratas). Siendo invisibles, eso sí, al menos no asustaríamos a la gente (ni ellos a nosotros, porque hay que ver el miedo que nos dan a veces).

Lo que sé respecto a la invisibilidad es que tiene que ver con un sonido que hacen con la lengua, involucra agua no salada y un movimiento medio raro. Lo malo es que no hemos visto desaparecer a tantos como para agarrarle la onda tan rápido.

Ah, y también sabemos ya que hay una tipa (dragona, pues) muuuuuy odiosa a la que todos le tienen miedo, hasta sus secuaces (que se me hace que son los que andan tras nosotros).

martes, septiembre 15, 2009

Ya entendí

Ya entendí (creo) cómo se hacen invisibles los dragones. Ahora tengo que enseñarle al mío a lograrlo. Lo malo es que no es muy disciplinado que digamos. ¡Ojalá se pareciera a mí! ¿Verdad?

Bueno, y por otro lado, ya también llegamos a la conclusión de que no es bueno toparse con gente. Se ponen muy locos cuando ven a mi dragón. O a mí. No entiendo. Creo que la gente es rara.

Ah, y la gran-jefa me pidió regresar porque va a sacar un libro y quiere que le eche un ojo. Pero le dije que no puedo porque todavía no encontramos a la mamá del dragón. Es más, todavía no encontramos cómo salir de Francia sin que nos vean los guardias de la frontera y los dragones que nos están esperando por allá por las nubes. En fin.

miércoles, septiembre 02, 2009

¡Por fin! iPod y vocales

¡Uyuyuy! Por fin pude arreglar mi iPod. Encontramos un tiradero donde ponen computadores, celulares y iPods que ya no sirven (porque resulta que contaminan muchísimo y no se pueden tirar nomás a la basura y ya).

Eeeeentonces, me puse a buscar las piezas que le faltaban a mi iPod, ¡y ya lo arreglé! Eso significa que ya, ¡POR FIN!, podré escribir todas las veces que quiera pero sólo cuando yo quiera.

Por lo pronto, sigo aprendiendo LenguaDragón, que no es tan fácil porque todo es con rayitas verticales y bolitas (como que alguien ya debería enseñarles que también hay rayitas horizontales o, mejor aún, ¡a escribir como la gente!

El caso es que ya estoy haciendo el alfabeto. Aquí van las vocales, para que aprendan conmigo y luego podamos descifrar juntos el "escribidero" que vemos por todas partes del cielo, porque resulta que mi dragón, como es tan chiquito, ¡apenas había empezado a saber leer y escribir! ¡Grrrrrrrrrr!:





viernes, agosto 21, 2009

¡Vimos algo increíble!

El tonto dragón morado nos siguió hasta un pequeño poblado y vimos algo increíble: pasó frente a todo mundo, ¡y nadie lo vio! Nosotros sí, pero como que se hizo invisible para las personas, lo cual explica por qué la cara de susto del panadero que vio a mi dragón, ¿no?

Ahora el chiste es acechar al moradín para que el dragón aprenda a hacerse invisible. ¡Sería tan útil! Imagínense todas las donas y pizzas y demás que podríamos tener. Bueno, pagando, claro, porque si no sería robar y eso sí que no.

Ah, y me escribió la gran-jefa. Dice que en su cumpleaños le mandaron otro arreglo con flores sospechosas y mejor fue a dejarlo al jardín, no fuera a ser que se la comieran de nuevo.

Bueno, me voy para averiguar cómo demonios se hace invisible un dragón.

jueves, agosto 20, 2009

Tons voy hacia donde se pone el sol

Bueno, ahora que ya me dijeron exactamente dónde estamos y hacia dónde dirigirnos, el dragón y yo emprendimos la marcha. Claro que... hoy es...

es...

es...

es...

¿De verdad no lo sabes, blogcito mío?

...

...

¡Es jueves de donas! Así que conseguimos unas en una tiendita monísima que decía "Patisserie" o algo así. El dueño nomás le vio la cara de hambre al dragón y nos regaló todas las que tenía. ¡Estaban buenérrimas!

Y bueno, ya con la pancita llena, emprendimos el vuelo, pero nos mantuvimos ni muy arriba (para que no nos detectara ningún radar) ni muy abajo (para que no nos viera la gente, que por alguna extraña razón, cuando nos ve ponen cara de que nunca habían visto un dragón. Qué locos, ¿no?).

jueves, agosto 13, 2009

Pues

Pues pasó que los dos dragones que nos perseguían quedaron absolutamente inconscientes. ¡No se esperaban aquel olor! Yo, claro, me tapé la nariz con una dona (ni modo), pero ellos... bueno, digamos que cayeron como los otros.

En otras palabras:

Gussi y su dragón: 4

Los dragones malvados: 0

¡Ja!


Y bueno, ahora necesitamos ayuda. Hemos dado tantas vueltas que a mí ya se me cayó la dona de la nariz y al dragón ya casi se le caen las alas. Según mi iPod estamos en estas coordenadas:
N 46° 9' 26.46'' W 1° 8' 24.97''
lo cual no me ayuda nada porque ¡no sé dónde estamos!. ¿Alguien me puede decir? Y es más, también díganme hacia dónde queda la República Checa.

viernes, agosto 07, 2009

Ay, qué cosas

Ayer fui a conseguir unas donas porque era Jueves-de-donas, obvio. Y dejé al dragón dormidito en el bosque. ¡Parecía cachorrito!

El caso es que cuando volví, jalando 17 cajas amarradas (¡qué fuerte soy!) y trepadas en un patín viejo (no en línea, por suerte), el dragón tenía mucha hambre, así que se comió catorce cajas (las donas, no las cajas), lo cual no me hizo NIN-GU-NA gracia.

Y ya estaba yo haciendo berrinche con MIS donas cuando ocurrió algo aún peor que lo que escribí antes: ¡el dragón se echó uno poderosísimo!

Qué horror.

Olía a &(%$#.

Y ya le iba yo a decir lo que pensaba cuando vimos un dragón morado con ojos amarillos venir hacia nosotros desde el aire. Por tierra, uno azul turquesa. ¡Ay, nanita! Nos echamos a correr, claro, pero, el bosque era muy denso y el dragón se atoró.

No, no saben lo que fue eso. Miedo es poco. Es nada. Sentí que tenía en la mano mi última dona.
Y en eso se me prendió el foco. ¿Saben qué hice?

¿No?

¿Noooooooooooooooo?


Mmm.

¡Pues le metí la dona al dragón en la bocota, le dije que se la tragara y que se echara otro!

Y sí. Se echó el más superhipermegaarchirequete peor de los gases que hayan pasado por el sistema digestivo de cualquier dragón.
Se oyó a tres kilómetros a la redonda como si el golpe de una espada gigantesca hubiera partido la Tierra desde el núcleo dejando salir la fuerza del planeta.
Apestó a huevos podridos con vómito de rata con popó de rana con pescado muerto con aceite de hígado de bacalao con acelgas rancias con leche agria con pedos de dragón. Y peor.

Y entonces, ¿qué creen que pasó?

jueves, julio 30, 2009

Esto ya es el colmo

Si me quedaba alguna duda, ya no. Alguien anda tras nosotros y no se detendrá hasta atraparnos...

...


...


...


... o matarnos.

Hace cinco días que estamos en medio de una batalla impresionante. Nos han atacado con rocas flameantes, matorrales ardientes, flechas encendidas... ¡qué de cosas! Mira que hay que ser mala onda para hacer todo eso, ¿no?
Así que el dragón y yo llevamos todo ese tiempo escapando, escondiéndonos, regresándoles una cucharada de su propia sopa.
Ayer, por ejemplo, hicimos que las rocas de lo alto de un risco les cayeran encima cuando venían volando tras nosotros otros dos dragones con una cara de malos que se les caía. Bueno, ojalá se les hubiera caído, pero no, nomás nos pelaban los dientes y echaban fuergo. Así que le dije al dragón que se fuera directo al risco, luego hiciera un giro en ángulo recto hacia arriba y cuando nos fueran a alcanzar, que con sus garras desgarrara el cerro. ¡Y eso hicimos!
Los muy tontos no se lo esperaban y les cayó tremenda lluvia de rocas en sus cabezotas. ¡Ja, ja, ja! Estaban tan aturdidos que ni vieron por dónde nos metimos y ya no pudieron seguirnos.
Ahora estamos en el bosque. Los árboles están tan juntos que el dragón no puede pasar a pie. Mejor dicho, a pata. Pero eso es bueno porque tampoco pueden vernos desde el aire.
Ya vimos un mensaje que dice: "Creemos que se fueron hacia el Norte. Son peligrosos. Dos de los nuestros están fuera de combate".
Lo que no saben, es que nos fuimos hacia el Este. ¡Ja!

jueves, julio 23, 2009

¡Ay, no!

Anoche el dragón y yo comenzamos a avanzar hacia el este ocultándonos entre los árboles y las no muchas montañas. Decidimos caminar (bueno, él camina y yo voy entre sus cejas) porque en el cielo comenzaron a aparecer muchos mensajes en dragonish, que es lo mismo que lengua dragón, diciendo que había que estar alerta porque los olores provenientes del sur de Francia indicaban que las presas estaban cerca.

¿Olores? ¿Presas?

No, gracias. Yo no quiero saber nada de eso. Así que le dije al dragón que más valía que dejara de quejarse de su pancita y nos pusiéramos en marcha porque, además, yo soy un tipo muy ocupado y no puedo pasarme la vida cruzando Europa para buscar a una señora dragón que quién sabe dónde se metió. Aunque bueno, en el fondo sí puedo porque el dragón es... es... pues mi dragón. Y no lo voy a dejar solo.

Pero mientras, recibí en mi iPod superalterada un mensaje de la gran-jefa que decía que en Estados Unidos también cerraron la revista Nick. WHAT?????? Bueno, entiendo que sin la que hacíamos nosotros la vida jamás será la misma, pero, ¿cerrarla también en EUA? Pues sí. Así es. Está hecho. No más revista Nick en ningún lado.

Estoy triste.

jueves, julio 16, 2009

El amarillo está de moda


¿Qué crees, blogcito mío? El Madame Tussaud's Wax Museum, que es el museo de cera más famoso del mundo, acaba de incluir a Bob Esponja en su exhibición. ¿Y sabes qué es lo mejor? Que es el primer personaje animado que tiene una figura de cera en dicho museo.

¿No me crees? ¡Tengo la foto para probarlo! ¡Ja!

Ah, el dragón ya está mejor. Ya no vomita... ¡pero qué gases se echa!





lunes, julio 13, 2009

No se podrán quejar...

Me estoy aplicando.

El nuevo video de Fede y Laita

Este es el nuevo video stop-motion de Fede y Laita. ¡Les quedó de pelos!

Aunque... se lo enseñé al dragón, ¡y casi me aplasta a mí de la manotada que soltó junto con una carcajada! No es chistoso, ¿eh?

¿Quieren saber a qué huele?

Dark Cosmo escribió sobre el olor de las vomitadas de dragón. ¿De verdad quieren saber a qué huelen? ¿Segurit@s? Digo, porque no por nada nos mudamos de cueva. (Bueno, además nos mudamos porque yo no iba a limpiar. ¡Hubiera necesitado como 37 cubetas grandes!).
El caso es que el olor... imagínense el peor-peor-peor que se hayan echado en su vida, mezclado con huevo podrido y atún echado a perder, más cáscara de naranja ya negra de tan pasada (no sé por qué, pero de verdad que olía a naranja fuchi y eso que no habíamos comido ni una) con el peor-peor-peor que hayan olido en su vida. Bueno, eso multiplíquenlo por 523 y sabrán a qué olía la vomitada que apestaba menos (porque no fue una, fueron cinco).
¡Uf! Ahora el dragón se la ha pasado con té y croissants (o sea, cuernitos). Pero ya está recuperando su color y ánimo. Yo creo que un par de días más y emprendemos el viaje. Mientras, yo me voy al bistró (o sea, al restaurant franchute donde he estado comiendo, sin que nadie se entere, claro).

Ya no dejaré de escribirte

Me choca dejar de escribirte, blogcito mío. ¿Sabes por qué lo hice? Porque en Francia todo es delicioso y el dragón se superenfermó de la panza. ¿Te imaginas lo que se requiere para limpiar vomitadas de dragón de una cueva? Bueno, no quiero ni contarte.
Claro que no las limpié, ¡ja!
Lo que hicimos fue mudarnos de cueva, pero no es fácil encontrar una lo suficientemente alejada de la gente como para que no nos vean, porque hay que ver de lo que son capaces las personas si se topan con un dragón. En una de esas, hasta contratan a un cazador especializado o a un cirquero para ponerlo en el espectáculo con los payasos y eso sí que no.
Bueno, el caso es que el dragón se enfermó y ahí me tienes consiguiendo hierbitas y haciéndole té para que se aliviara de tanto comer. ¿No te choca la gente que come como si fuera el último día del mundo? De veras, hay que ser...
Lo único bueno es que ya sé leer dragón (¿cómo le pondré al idioma? ¿Dragonish? ¿Dragoñol? ¿Dragonchute? ¡Ah, ya sé! Voy a hacer una votación.
Bueno, el caso es que mañana o pasado te digo cómo se lee el idioma dragón. Hoy en la noche vamos a mandar un mensaje y ya veremos qué nos contestan. Luego te cuento.

miércoles, junio 17, 2009

¿Aprender dragón?

Hola, blogcito mío. Sé que te había tenido abandonado pero es que han pasado muchas cosas desde la última vez que te escribí.
Para empezar, estuvo el asunto de escapar del dragón mala onda que nos acechaba desde lo alto de una montaña. ¿Sabes qué hice? La verdad es que soy un genio. Ya te había dicho que los dragones se comunican con algo así como señales de humo, ¿verdad? Haz de cuenta que echan tantito fuego por la boca o por las fosas nasales y van armando palabras con puntos y rayas de humo negro, como si fuera clave morse. Bueno, el caso es que le dije al dragón (al mío, no al mala onda) que hiciéramos montoncitos de hojas secas, unos más grandes y largos que otros, y que al prenderlos con fuego formaran nubecitas de humo que dijeran: "Nos vemos en Italia" con todo y una flecha apuntando al sureste.

Así que el dragón escribió en el suelo cómo se diría esa frase en idioma dragón y yo armé lo de las hojas. Luego, cuando vi que el mala onda estaba fuera de su cueva, le dije a mi dragón que las incendiara y vimos cómo el humo ascendía y, en cuanto el otro dragón lo vio, se lanzó al aire en la dirección que apuntaba la flecha.

Nosotros, obvio, no nos fuímos a Italia sino a Francia, o sea, al norte.

Y eso me lleva a otra razón por la que no te había escrito: ¡No sabes lo BIEN que se come aquí! ¡Uyuyuy, qué cosa! No importa a qué le hinques el diente, todo es DELICIOSÉRRIMO. Así que recuperamos fuerzas y energía dándonos un buen banquete y calculando el tiempo de vuelo para que el mala onda llegara a Italia.

Y entonces... bueno, entonces decidí que si voy a ir a buscar a la mamá del dragón, debería aprender a hablar en dragón, porque justo anoche vimos un mensaje que según mi dragón decía: "La reina apresada está y el heredo legítimo perderá la cabeza".

¡Ups! ¿Crees que se refieran a perderla-perderla? ¿O será más una metáfora?

¿Tú qué opinas?

miércoles, junio 03, 2009

Querido Gussi Green

GUSSI GREEN, TENGO UN PERRO Y ES MENSO. QUÉ HAGO PARA Q´ DEJE DE SERLO?
—Anónimo

Convéncelo de que es un caracol. Como los caracoles son todavía más mensos, ¡tu perracol será un Einstein!

martes, junio 02, 2009

Ojalá tuviera un manto de invisibilidad...

...como el de Harry Potter. ¡El horrible dragón que nos acecha nomás no cierra el ojo nunca! No entiendo cómo no duerme si el mío hasta ronrronea como gatito.

Pero ya lo pensé y mañana o el jueves emprenderemos la huída. Nomás tengo que terminar una cosita para distraerlo y ya verá cómo ni cuenta se va a dar...

sábado, mayo 30, 2009

Sí es malo

Ok, a ver. Si el dragón que nos está atacando fuera la mamá de mi dragón, ¿no creen que mi dragón ya lo hubiera reconocido o ella a su hijo? No, la cosa no va por ahí. Además, se me hace que es un "él".

La cosa es que decidimos que no podemos escondernos para siempre. Así que salí a ver quee averiguaba. El muy malvado está en la cima de una montaña desde donde podría vernos en cuanto nos movamos (bueno, a mí no, pero a mi dragón, sí).

Además, ha estado enviando mensajes (esto lo sé porque los dragones usan humo para comunicarse, así como los indios estadounidenses). De hecho, me estoy aprendiendo el abecedario para entenderles.

Pero mientras, hay que comer. Lo malo es que ni modo de pedir pizzas a la tercera cueva de la izquierda, detrás de la roca grande, ¿verdad? Y menos imaginar que van a llegar en media hora o menos. Así que no me ha quedado más que juntar moras, ciruelas y olivas. Menos mal que en la cueva se filtra agua (y que sabe tan rica). ¿Saben lo que es alimentar a un dragón? ¿Cómo puede alguien comer tanto? Es una barbaridad.

sábado, mayo 23, 2009

Otra vez el verde

Creíamos estar a salvo en España. Nos escondimos en unas montañas donde plantan olivos (¡ah, qué ricas aceitunas!) y estábamos comiendo paella de un restaurante cercano (el pobre cocinero no entendía por qué se le acababa tan rápido lo que preparaba. ¡Ja!) mientras dibujábamos un mapa para llegar a la república Checa, que es donde el dragón cree que está perdida su mamá.
Pero hace una semana el enorme dragón verde que salió del mar nos encontró aquí.
Imagínatelo, blogcito mío: Mide como diez metros. Sus escamas brillan y son del mismo tono de verde que las esmeraldas. Tiene el cuello largo y la cabeza coronada por cuatro cuernos. Sus ojos son rojos, como si tuvieran fuego adentro y lanza unas llamas que ni te cuento. Cuando ruge, me pongo chinito porque suena como a cien tambores batiendo al mismo tiempo. Hemos visto a la gente correr asustada a sus casas sin saber de qué se esconden. Sus alas no salen de los homóplatos, como los dibujan en casi todos los libros, sino de todo su lomo, y se ven musculosas pero muy flexibles. Cuando las abre se ve que están controladas por un músculo tan fuerte y grande como sus patas, pero que termina en un espolón (como un gancho) en la punta. Forman una especie de T perpendicular a su cuerpo y redondeada, como si extendiera una capa semicircular. Y todavía no te platico de sus garras. Sus uñas podrían abrir un tren o un avión como si fueran latas de anchoas (por cierto, no me gustan las anchoas). Su vientre es amarillo y las palmas de sus patas, tan rojas como sus ojos. Es una cosa de pavor.
Lo que me da risa es que no tiene cola. No sé si así sea o si la perdió en alguna batalla.
Ha estado sobrevolando la zona donde estamos escondidos. Estoy seguro de que no nos ha visto (si no, ya nos habría hecho chicharrón), pero sabe que no estamos lejos y quiere cazarnos.
Tenemos que encontrar la manera de distraerlo, de hacer que se vaya a otro lado para que nosotros podamos continuar. ¿Alguien tiene una buena idea para lograrlo?

jueves, mayo 14, 2009

Ya pasamos España

No había podido escribir porque mi iPod se descargó. Pero en España encontramos a un científico loco, con todo y cabello morado, a quien no le sorprendió nada mi presencia ni la del dragón. Lo único que dijo fue: "Ah, un dragón".
El caso es que le expliqué el problema y nos regaló un minigenerador recargable con luz solar o viento. Lo bueno es que la chunche esta es pequeña y que el dragón la carga, que si no...
Bueno, pero para hacer la historia corta, volar de las islas Azores a Portugal nos dio un miedo del demonio. Digo, porque capaz de que nos salía el maldito dragonsísimo aquel...

domingo, mayo 03, 2009

¡Casi nos matan!

Blogcito mío, no te había escrito porque todavía no se nos pasa el susto.

Estamos escondidos en una isla que se llama Terceira y que pertenece a Portugal (de eso me enteré cuando ordenamos las pizzas). Pero antes de llegar aquí veníamos volando sobre el océano, como te conté, cuando se desató una tormenta con rayos y todo.
Yo me aseguré de tapar bien las cajas de donas porque eran las únicas provisiones que nos quedaban, y el dragón se aseguró de evitar los rayos (buen trabajo en equipo, ¿no?), pero en eso, del mar, salió como flecha un dragón enorme con escamas verde esmeralda que parecían emitir luz propia cada que caía un rayo. Sus alas medían más de 12 metros de envergadura y eran amarillas como la yema de un huevo. Tenía ojos de un rojo intenso que nos miraban como si fueran cañones láser, y desde que lo vimos venir supimos que sus intenciones no eran buenas. Se lanzó hacia nosotros con las garras de sus patas hacia adelante, como si pensara clavárselas en el vientre a mi dragón cual brocheta de domingo. Cada garra era como un cuchillo afilado de al menos 30 cm de largo.
A mi pobre dragón casi le da un infarto.
Pero entonces le dije que como él era más pequeño y joven, seguramente podría perder al grande metiéndose entre las nubes y maniobrando con vueltas muy cerradas tratando de que un rayo le cayera al grandulón —y no a nosotros, claro—.
Así estuvimos, con el otro casi pisándonos la cola como veinte minutos.
Los rayos caían por todos lados y el ruido de los truenos era ensordecedor. El dragón grande comenzó a echar fuego por el hocico y yo pensé que le iba a tatemar la cola a mi dragón y, de paso, a echar a perder las donas.
Pero mi dragón fue superhábil y se puso a cazar rayos, lo cual no parecía tan difícil porque caían por todos lados. En una de esas dimos una voltereta como en U invertida hacia el agua, como si quisiéramos hundirnos en el mar, y cuando el dragón grande casi nos agarra el mío dio vuelta a la izquierda y aceleró. Fue entonces cuando vi un rayo atravesar al dragón villano. Se retorció y emitió rugidos que seguro se escucharon hasta la Antártida, y después cayó al agua como plomo. No volvimos a saber de él.
Afortunadamente, después de eso vimos tierra firme y volamos a escondernos en una cueva. Nos moríamos de miedo.
Ahora la pregunta es, ¿por qué un dragón querría hacerle daño a otro?
¿Tú qué opinas?

sábado, abril 25, 2009

Ya me dijeron...

...que hay gripe porcina en México (Carmen y Alamaster). Me pregunto: ¿estarán bien Los ex Nick?

¿Cuál epidemia?

Ya casi no tenemos provisiones y yo no veo nadita de tierra firme. Todo sigue siendo mar y cielo.

De verdad: Si alguien busca una oportunidad de negocio en estos tiempos de crisis, debería considerar poner una pizzerían en medio del océano para viajeros como nosotros. Digo, si yo viajo en un dragón, supongo que otros también, ¿no?

Oye, Ethan: ¿de qué epidemia me salvé?

viernes, abril 24, 2009

Azul

Llevamos tres días volando.

Volteo para abajo y veo mar, mar y más mar que en realidad es el Océano Atlántico.

Volteo para arriba y veo cielo, cielo y más cielo, ocasionalmente habitado por alguna nube.

De noche, eso sí, las estrellas se ven increíbles.

Ya nos acabamos las pizzas y nos quedan dos cajas de donas —porque las estamos ahorrando—. Nos queda una botella de agua (trajimos cinco) y no tenemos golosinas. ¡Grrrr! Debería haber pizzerías a la mitad de ningún lado, ¿no? ¿O qué esperan que hagan los viajeros como nosotros?

Por cierto, le dije al dragón que vuele bajo para que no nos capte ningún radar y piense que somos un avión enemigo. Ya nomás nos falta que vengan a bombardearnos.

Y lo último es que descubrí que el dragón le tiene miedo al agua. No sabe nadar. Yo sí sé: aprendí en el jacuzzi que está en la oficina de la gran-gran-jefa.

Estoy perdiendo recepción, así que te dejo por el momento.

martes, abril 21, 2009

Nueva empacada

Ok, ahora sí ya estamos listos. Siguiendo el consejo de Dark Cosmo, esta vez pedimos 43 pizzas, 22 cajas de donas y siete litros de helado de chocolate (al dragón le choca el de vainilla, ¿sabías?). Ya empacamos todo porque dice él que tenemos que cruzar el charco, es decir, volar sobre el Océano Atlántico hasta llegar a las islas Azores, que están un poco antes de Portugal. La idea es descansar allí (como el dragón es cachorro, no aguanta volar distancias demasiado largas, además de que estando conmigo no ha tenido que volar mucho, así que digamos que no está al cien en condición física). Conseguimos una brújula por si las dudas, y en mi iPod voy a seguir nuestro progreso con Google Earth. ¡Qué bueno que tengo conexión a internet!, ¿no?

Ok. Ya les iré contando conforme avance el vuelo y el plan.

lunes, abril 20, 2009

Yucatán

El dragón y yo estamos acampando junto a un cenote en Yucatán. Ya vinieron a visitarnos un jaguar, varias guacamayas y tucanes y un montón de changos. ¡Resulta que ninguno de ellos había visto jamás a un dragón! Y sólo se acercaron cuando los convencí de que no iba a hacerles nada y se la pasaron de pelos porque les contamos la historia de Los Nick y el cajón de las golosinas.
Ya nos acabamos las pizzas y las donas y el helado. Se me hace que tendremos que ir a Mérida a pedir más...

viernes, abril 17, 2009

Ahora sí me voy

¿Sabes cómo se comunican los dragones a larga distancia? Envían mensajes en las nubes. Lo malo es que hay que saber leer dragón para descifrarlos. Yo no sé, pero el dragón sí. Y dice que no hay noticias de su mamá y por lo tanto ya no puede esperar más: tiene que ir a buscarla.

Y como el dragón es mi amigo, voy a ir con él.

Por eso no te había escrito, blogcito mío. He estado empacando.

Lo bueno de tener un dragón, aunque el mío sea apenas un cachorro, es que puedes cargarle todo lo que quieras porque son muy grandes. Hasta ahorita llevo:

• El iPod superrecargado que me regalaron Los Nick. Así me mantendré en contacto contigo donde haya conexión.
• Una cobija.
• Un cojín.
• Mi colección de revistas Nick.
• Mis audífonos para escuchar a The Beatles y toda la demás música que me gusta (qué bueno que cupo casi toda).
• Una botella de agua.
• Una tele portátil.
• Todo lo que había en el cajón de las golosinas.

Mañana, antes de irnos, vamos a pedir: 27 pizzas, 16 cajas de donas y 6 litros de helado de chocolate. Espero que sean suficientes para el viaje de ida. ¿Tú qué opinas?

Le dejé una nota de despedida a Tania, a Hec, a la gran-jefa y a la gran-gran-jefa.

Estoy triste.

miércoles, abril 01, 2009

¡Super reven en el canal Nick!



¿A poco creías, blogcito mío, que me había quedado sin informantes que me informaran de información informativamente muy valiosa sobre el canal Nick?

Por supuesto que no.

Y es por eso que sé de muy buena fuente que el 6 de abril, o sea, el próximo lunes, el canal ya no va a ser naranja sino... ¡amarillo!

¿Sabes por qué?

¿No?

¡¿No?!

¿En serio?

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Bueno, ok, te voy a contar: ¡Bob Esponja cumple 10 añotes!

¡Feliz cumple, Bob Esponja! Te voy a comprar diez pasteles amarillos... ¡y me los voy a comer todos yo solito! ¡Ja!

Y bueno, para terminar, ¿quieres saber desde hoy, antes que nadie, cómo se va a ver el canal dentro de cinco días? Aquí te va:

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Supercool, ¿no?

jueves, marzo 26, 2009

¡Otra vez me dejaron sin internet!

¡Grrr! Con eso que desbarataron al equipo de Los Nick, me dejaron sin conexión a internet. Y ni modo de salir a decir: "¡Hey, aquí estoy yo!", porque entonces todo mundo hubiera sabido dónde está mi guarida y eso ¡nunca! (Sólo el dragón sabe).

El caso es que después de mucho cablear, por fin encontré otro lugar para conectarme y ese está tan escondido que nadie lo va a saber, así que... ¡estoy de regreso, blogcito mío!

Por lo pronto y como lo más importante de hoy, es que es... ¡jueves de donas! Y ya descubrí el lugar en el que se reúnen Los ex Nick y, lo más importante, cómo entrar sin ser visto, lo cual significa que... vaya sorpresa que les espera. Me traje 27 donas (porque tengo que darle un par al dragón). ¡Ja!

Ah, y como en la última encuesta que puse me dijeron que sí querían saber a dónde habían mandado a Los Nick, les voy a contar, pero no se lo digan a nadie:

Tania está ahora en la revista Witch.
Hec está ahora en la revista Eres Niños.
La gran-jefa es ahora la gran-jefa de la revista Cinemanía (lo cual significa que voy a ver muuuuchas películas).

Y por último, se me olvidó decir que en mi viaje para ver ballenas hay una foto que es importantérrima. Es esta:

¿Saben por qué? Es una estrella de mar y una esponja marina amarilla, en otras palabras... ¡Bob Esponja y Patricio Estrella, en vivo y a todo color! ¿A poco no está padrísima?

Bueno, te escribo pronto, blogcito mío.







domingo, marzo 01, 2009

Más de mi viaje...



Y allá vamos de nuevo a ver ballenas con Max Steel...




Chequen cómo ésta sacó su aleta dorsal para saludar a los del bote. ¡Qué ganas de darle la mano tenían todos!






Pero luego les enseñó la cola. ¡Ja!





Cuando sacan la cola es porque quieren tomar impulso para sumergirse mucho, lo cual significa que uno ya no va a ver a esa ballena en un buen rato.




Esta otra también está sumergiéndose.




Ésta pasó por abajo de nuestro bote. ¡Fue emocionante! Y tenía una cría, que se llaman ballenatos.




Este es el pequeño ballenato. ¿Ya vieron que no tiene percebes todavía? Se ve que Sirenomán no los ha dejado pegarse a su cuerpo.




Y aquí estoy yo con el ballenato. ¡Uyuyuy! Pero luego su mamá le dijo que se estaba acercando demasiado a nosotros y lo regañó. Y yo no me iba a poner a discutir con una ballena del tamaño del dragón, sobre todo porque el dragón no fue al viaje.




Aquí se ven la mamá y su cría.



¡Y miren! ¡¡¡Se dejan acariciar como si fueran perritos!!! Eso es lo MÁ-XI-MO.



Allá van de nuevo la mamá y la cría.



Esta ballena estaba tan contenta que salió a saltar.






¡Splash!




Y también vimos varios grupos de delfines.




Esta otra salió a saludarnos y yo posé para la foto, para que luego no digan que quién sabe.




Y como estaba nublado, algunas provocaban arco iris cuando exhalaban.




Allá va otro delfín.





¿Cuántas ballenas encuentras en la foto de arriba?








¡Hasta en las nubes habían ballenas! ¿Ya la vieron?





Este cormoran parecía estar metiendo freno de mano, ¿no?





Mientras que este otro se echaba a volar.





Y estos, bien a gusto, los veían con cara de "¿qué les pasa?".




¿Quién encuentra al gorrión de manglar en la foto de arriba?




Y este pajarito tenía un peinado muy punk, así que me cayó muy bien.








Algunas aves tienen el pico para arriba, otras para abajo y otras plano. Depende de qué se alimenten. ¡Darwin tenía razón! (Siempre lo supe).





Estos cormoranes están esperando... bueno, vete tú a saber qué están esperando. No hablo su idioma.




La garza azul decidió que no le caíamos bien y mejor se iba a dar el rol.






Y esta otra pasó a nuestro lado, en la zona de manglares.





Cuando exhalan, algunas ballenas echan chorros en forma de corazón. A lo mejor es porque están buscando pareja y andan todas cursis, ¿no?




¿Qué creen que es lo de arriba?




¿Y lo de arriba?





Las dos son partes de este esqueleto de ballenato. Seguramente nació enfermo y murió muy chiquito. ¡Qué triste!





Kuyimá, donde nos alojamos, era hermoso por donde lo vieras. Checa nomás el atardecer, blogcito mío. Y yo... en la playa. Me hice una hamaca con una hoja y ni te cuento lo a gusto que estaba.




Bueno, quizá no tan a gusto como estas gaviotas. ¿Ya viste a las muy comodinas? Allí en nuestro bote, arruyadas por el mar.




Como ya les conté, a San Ignacio llegan muchas especies de aves migratorias, como esta.




Y como las de arriba. Las gavitoas a mí se me hace que sí son locales.





Luego, la gran-jefa y yo nos metimos otra vez a caminar en la marisma, que es cuando la marea baja y queda agua poco profunda. Encontramos a este pulpito. Está de pelos, ¿no? (Bueno, quizá no porque está más calvo que un huevo. ¡Ja!).






Y a donde voltearas, habían cosas padrísimas, como estas plantas marinas.





O este otro pulpo. Nos echó un chorro de agua para asustarnos pero no era más grande que tu mano. A mí, francamente, sí me dio miedito y corrí a meterme en la mochila de la cámara de la gran-jefa, pero a ella le dio risa que algo tan chiquito se sintiera tan feroz. Claro, a ver si hubiera dicho lo mismo si le sale un pulpo de diez metros.





Y aquí una estrella marina entre las algas. Todas las estrellas que vimos eran color Nick.





Esta es la vértebra de algún pez grande, pero ya se convirtió en un pequeño ecosistema: tiene algas, corales, percebes y caracoles adheridos a ella.




Y hablando de corales, este me recordó al dragón. ¿Verdad que tiene cara de dragón?





Estas conchas son color Nick, así que le dije a la gran-jefa que le tomara foto.




Y estos caracoles que son como del tamaño de tu uña pulgar y que quizá digas "ay, qué tiernos", son unas bestias carnívoras devoratodo. Los vi echarse una estrella de mar en un santiamén. Llegan de a montón y no hay quién se salve de su voracidad. ¡Como de peli de terror!





Ahí están de montoneros.



Y el último día, antes de volver al aeropuerto con pista de arena para tomar nuestra avioneta, fuímos a un bosque de espinas, que es un lugar donde hay muchas cactáceas.






Este es el esqueleto de una de las de arriba. Increíble, ¿no? Parece columna griega.




Y este también me recordó al dragón. Se me hace que ya lo extrañaba.





Cuando nos subimos al avión que nos trajo de Hermosillo a México, vimos la luna llena por la ventanilla. Fue como una manera de acabar el viaje.

¿Qué tal? Les dije que había estado ¡hipermegarrequetearchisuperincreibilísimo!